El amor no correspondido duele como el infierno.
Levi Brown ha estado enamorado de Noah White desde que era un adolescente, pero Noah no está buscando una relación. Cada vez que le ve, su corazón sufre por aquello que sabe que no puede tener. Porque Señor, quiere a Noah: en su vida, en su cama.
Especialmente, en su cama. El único motivo por el que Levi sigue siendo virgen es porque está esperando a Noah. Solo que Noah no le quiere a él.
A lo mejor, ha llegado el momento de aceptar, finalmente, su situación, y seguir adelante con su vida.
Algo se agita por primera vez.
No es que Noah White no encuentre atractiva a la gente. Lo único que sucede es que no quiere meterse en la cama con ninguno de ellos. Levi y él han sido como hermanos durante la mayor parte de sus vidas y, cuando una reveladora noticia tambalea los cimientos del mundo de Levi, Noah está allí para él. Cuando su relación se intensifica, Noah está excitado, entusiasmado... y confuso. Aunque, en cierta forma, tiene sentido que la primera persona por la que se siente atraído en su vida sea su mejor amigo. Pero no lo tendría si Levi no le quiere de la misma forma.
¿Cuánto tiempo pasará hasta que Levi y Noah se den cuenta de lo que siempre han tenido bajo sus narices?
A lo mejor, ha llegado el momento de hacerles una intervención.